El Cachón de la Rubia, un espacio declarado zona protegida en Santo Domingo Este, será convertido en un espacio donde las familias puedan acudir a pasar un rato en total tranquilidad. Así lo informó el alcalde Manuel Jiménez, al dar el primer picazo para la intervención de ese parque ecológico, donde se instalarán una serie de atracciones para el disfrute de los ciudadanos.
Los trabajos se realizarán en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente y la colaboración del Programa de las Naciones para el Desarrollo Unidas (PNUD).
Jiménez dijo que el espacio, será un referente del ecoturismo y se podrá utilizar por los centros educativos, universidades e investigadores para desarrollar sus investigaciones.
Contará con un mirador central ecotemático, un área de usos múltiples donde se podrán realizar diversas actividades como cumpleaños, clubes literarios, obras de teatro, actividades religiosas y otros eventos culturales, en un entorno que involucra la naturaleza dentro de un circuito urbano.
Las actividades serán totalmente ecológicas, no se permitirán ruidos innecesarios, las bocinas estarán prohibidas en el espacio será dedicado a la familia. Además, el parque tendrá rutas peatonales y ciclovías, no se permitirán bebidas alcohólicas, ni actividades nocturnas, como forma de mantener el área para la meditación y el silencio.
«Este espacio será preparado con áreas para deportes, entretenimiento de niños y adultos mayores» dijo el alcalde Manuel Jiménez. Entre otras novedades figuran murales temáticos que serán colocados en áreas de esparcimiento.
El Parque Manantial Cachón de la Rubia, creado por Decreto 207 del 20 de marzo de 2002, es una reserva natural que forma parte de los 16 puntos de la Ruta Turística Santo Domingo Oriental. Está ubicado en Cansino Adentro y es uno de los principales atractivos ecoturísticos con que cuenta Santo Domingo Este. Posee múltiples manantiales y una extensa flora. Su fauna incluye aves y anfibios de diversas especies que hacen del espacio un lugar atractivo para quienes gustan disfrutar de la naturaleza al máximo.