Miami.- Las poblaciones costeras del sureste de Estados Unidos apuran este martes los preparativos ante la inminente llegada de Francine, que se prevé mañana miércoles toque tierra como un huracán en la costa de Luisiana, que permanece bajo estado de emergencia.
Las poblaciones costeras de este sureño estado han recibido órdenes de evacuación a causa de los fuertes vientos y la marejada ciclónica que producirá la tormenta tropical Francine, que se prevé en el transcurso de hoy se intensifique hasta convertirse en un huracán de categoría 2 en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de 5.
El gobernador de Luisiana, Jeff Landry, declaró en las últimas horas el estado de emergencia para facilitar la distribución de ayuda y recursos y de esta forma asistir a quienes resulten afectados por Francine, que este martes presenta vientos máximos de 100 kilómetros por hora (65 millas).
“Declaración de emergencia”
Por su parte, Sharon Weston Broome, la alcaldesa del municipio de East Baton Rouge, en el sureste de Luisiana, emitió hoy una “declaración de emergencia por desastre”, mientras que las escuelas y las oficinas del Gobierno local de esta demarcación se mantendrán cerradas los días miércoles y jueves.
“Estamos limpiando activamente los desagües pluviales, reponiendo en los lugares de recogida de sacos de arena y estamos completamente preparados para responder a nuestra comunidad”, señaló en un comunicado la alcaldesa de este municipio, equivalente a un condado y el más poblado de Luisiana.
Broome invocó a la población tomar “muy en serio esta tormenta” y aplicar las precauciones, que incluye mantener una reserva de alimentos no perecederos y suministros como para un periodo de por lo menos 72 horas, debido a la posible pérdida de electricidad.
La alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, realizó la misma invocación a quienes viven en esta ciudad, la más poblada del estado y en donde también se ha ordenado el cierre de escuelas y oficinas públicas.
Francine se convertirá en huracán
Francine, que se formó este lunes en el Golfo de México y es la sexta tormenta en la actual temporada de huracanes en el Atlántico, ha motivado un aviso de huracán para la costa de Luisiana desde Sabine Pass hasta Grand Isle, y desde High Island hasta Sabine Pass.
Hay alertas de marejada ciclónica para Vermilion Bay y para High Island (Texas) hasta la desembocadura del río Misisipi (Luisiana).
La tormenta, que se formó tras unas semanas de calma en la cuenca atlántica, se mueve hacia el norte a 7 kilómetros por hora (5 millas por hora) y se pronostica que hoy desacelere para luego incrementar su velocidad de desplazamiento a la vez que gire hacia el noreste.
Lluvias de 30 centímetros
Se espera que Francine produzca lluvias de hasta 30 centímetros en áreas del noreste de México y el sur de Texas, y que eleve el mar hasta unos 3 metros por encima del nivel habitual en Cameron y la Bahía de Vermilion, en Luisiana.
El anterior sistema ciclónico que se formó en el Atlántico fue Ernesto, que apareció en agosto como una tormenta tropical y llegó a ser un huracán de categoría 2 en la escala Saffir-Simpson, de un total de 5.
Ernesto, que causó graves inundaciones y apagones en Puerto Rico, lo mismo que estragos en las Islas Bermudas, es hasta el momento el tercer huracán en lo que va de temporada en la cuenca atlántica, que comenzó el pasado 1 de junio, y desde entonces ha producido también las tormentas tropicales Alberto, Beryl, Chris, Debby.
De ellas Beryl, Debby y Ernesto se fortalecieron hasta llegar a huracanes. Beryl incluso alcanzó la mayor categoría en la escala Saffir-Simpson, la cinco, causando destrucción y muerte en el Caribe y en Estados Unidos.
Se prevé que esta temporada de huracanes en el Atlántico sea una de las más activas e intensas en décadas, con la formación de hasta 25 tormentas y 13 huracanes.
EFE