La Liga Pimentel dejó inaugurada la cuarta edición del Clásico de Béisbol de Pequeñas Ligas 2025, en opción a la Copa SEABOARD, dedicado a la periodista Carmen Aybar. El acto tuvo lugar en el complejo de la academia Pimentel.
Karel Williams, delegado de Aruba, valoró positivamente el montaje del evento, así como la presencia de padres y familiares de los atletas.
“Esto es lo que se llama una verdadera fiesta deportiva de béisbol infantil”, exclamó.
Por su parte, Omar de los Santos, director técnico, informó que en el torneo participan equipos de Aruba, Canadá, México, Venezuela, Colombia —actual campeón— y los anfitriones de República Dominicana.
“Para la Liga Pimentel, organizadora de este evento, es motivo de gran satisfacción contar con la presencia de los países mencionados, los cuales, desde hoy, estarán compitiendo por la conquista de la Copa SEABOARD, en un torneo dedicado a la prestigiosa comunicadora Carmen Aybar”, afirmó.
De su lado, Gerlien Croes, ministra de Deportes de Aruba, destacó el entusiasmo que se vive en República Dominicana por el béisbol, así como la gran hospitalidad del país hacia sus visitantes.
Fernando Geraldino, gerente de Responsabilidad Social Corporativa de Seaboard Energía Limpia, expresó sentirse honrado por el reconocimiento a la empresa que representa.
“Para SEABOARD, es más que una responsabilidad respaldar el deporte; en esta ocasión, apoyamos con orgullo a los niños beisbolistas”, indicó.
Durante la ceremonia se entregaron placas de reconocimiento a la homenajeada Carmen Aybar y a Gerlien Croes.
“Quiero agradecer a los organizadores de este torneo, encabezados por Cristian Pimentel, por esta dedicatoria, la cual me motiva a seguir trabajando aún más en favor de la niñez deportista”, expresó Aybar emocionada, acompañada de su hijo Samuelito.
Previo al acto central, se entonaron las notas del Himno Nacional dominicano, se realizó una invocación al Todopoderoso y se hizo el juramento deportivo.
La ceremonia concluyó con el lanzamiento de la primera bola por parte de Carmen Aybar, que fue bateada por Gerlien Croes y recibida por Fernando Geraldino. Las mascotas de los Tigres del Licey y los Leones del Escogido fungieron como árbitros en un cierre simbólicamente festivo.