Santurce, Puerto Rico.– En el inicio de la Semana del Autor de la República en Puerto Rico, la escritora quisqueyana Ángela Suazo, presentó su novela titulada » Se hizo polvo y sopló el viento.
La actividad realizada en la Casa Dominicana en Santurce, contó además con un conversatorio entre el ingeniero Francisco E. Ramírez, presidente de la Junta de Directores de la institución y el editor de la novela, Carlos Roberto Gómez Beras, lo que provocó un diálogo entre el invitado que habló sobre su testimonio en la Revolución de Abril, la autora de la historia y el acto creativo, siendo el editor quien condujo el acertado diálogo.
La autora Informó que la obra fue presentada formalmente en la Feria del Libro del 2024, por la Editorial Isla Negra.
» Hoy la editorial me recibe en Puerto Rico, honradísima con los autores presentes y lectores que vinieron a compartir sus experiencias del libro, lo que significa un honor para mí poder hablarles de mi libro al público presente, donde la ficción es parte de la obra además de tocar dos temas neurológicos como los son de alzheimer, la revolución de abril», expuso.
Manifestó que la obra fue escrita en versos y prosa poética, donde el estilo de escribir la novela, resultó un poco controversial, pero fue la forma de cómo, llegó a ella.
«Esos estilos literarios, fueron las mejores maneras de yo poder transmitir los sentimientos y las emociones, pues el libro habla de los recuerdos, las lealtades familiares, tomas de decisiones que no nos pertenecen», recalcó.
«En el convulso contexto de la República Dominicana, en la Revolución de abril de 1965, la novela explora cómo el pasado moldea el presente y el futuro, «Se hizo polvo y sopló el viento» es una oda a la resiliencia, la memoria y la inquebrantable conexión entre generaciones'», expuso.
Explicó que en la historia hay dos personajes que viven
momentos de la vida muy distintos, personajes que
se complementan y se contraponen.
«El libro toca igualmente los temas de la identidad, esos esfuerzos por recordar hechos que estamos destinados a olvidar, esos recuerdos y como nuestra familia nos sostienen», dijo.
Explicó que en la obra «Se hizo polvo y sopló el viento», son dos generaciones, dos mujeres que emprenden un viaje profundo y transformador, mientras que la abuela, Laura Díaz Toribio, enfrenta su ocaso, su nieta, Laura Verónica, navega por un mar de decisiones y expectativas.
‘»A medida que la abuela comparte con su nieta su tumultuosa historia, ambas se toman de la mano del alma, mientras se adentran en el laberinto de su herencia familiar, desenterrando secretos que han permanecido ocultos, por demasiado tiempo,
descubriendo que el amor y la lucha por la identidad, por la libertad, trascienden las generaciones, donde su conexión se vuelve un faro en medio de la confusión», manifestó.
» En el convulso contexto de la República Dominicana en abril de 1965, la novela explora cómo el pasado moldea el presente y el futuro. «Se hizo polvo y sopló el viento» es una oda a la resiliencia, la memoria y la inquebrantable conexión entre generaciones. Acompaña a estas dos Lauras en un viaje que trasciende el tiempo, donde los caminos se entrelazan y la vida se reconstruye en cada latido».
Durante el acto se presentó un conversatorio entre Francisco E. Ramírez, Pachin, presidente de la Junta de Directores de Casa Dominicana, junto con la autora Angela Suazo y el editor de la novela, Carlos Roberto Gomez Beras, provocando una especial sinergia al momento.
Francisco Pachin Ramírez, habló sobre su testimonio en la Revolución de Abril, en tanto que la autora de la historia, contó que razones la llevaron a escribir la obra, el editor, explicó el acto creativo y condujo el acertado diálogo.
La presentación contó con la presencia de varios de los escritores dominicanos, que serán homenajeados el próximo sábado, en el cierre de esta Semana del Autor de la República Dominicana en Puerto Rico.
Asistieron los escritores dominicanos Eugenio Garcia Cuevas, Doris Melo, Miguel Patiño, Dulce Elvira de los Santos, Israel Mercedes, Nelson del Castillo, Antonio Nelson Soto y Ramón Dario Jimenez.
Al final, el público tuvo la oportunidad de preguntar, comentar, comprar el libro y tomarse fotos con la autora en la firma de los libros.