La ola de calor agobiante que durante las últimas semanas golpeó a diferentes ciudades de Estados Unidos este jueves llegó a la capital con temperaturas previstas para el área metropolitana cercanas a los 40°.
El presidente Joe Biden anunció este jueves una serie de medidas en busca de “proteger a los trabajadores y las comunidades” por estas olas de calor. “Estamos aquí para hablar la amenaza existencial que implica el cambio climático”, dijo Biden al empezar el evento. “Y es una amenaza”, agregó.
Agregó que “ya nadie puede negar los impactos del cambio climático” y recordó como cuando él llegó a la Casa Blanca aún había quienes lo hacían, en referencia a algunos rivales republicanos. En un comunicado más temprano, la Casa Blanca había dicho que estas medidas se anunciaban en momentos en que “muchos republicanos en el Congreso continúan negando la existencia misma del cambio climático, promocionan teorías de conspiración y siguen comprometidos con la derogación de la Ley de reducción de la inflación del presidente, el proyecto de ley de protección climática más grande de la historia, que socavaría la salud y la seguridad de sus propios electores”.
En la conferencia Biden ennumeró los tornados, los incendios que este año fueron presentes en muchas ciudades de Estados Unidos por el humo que llegó desde Canadá y las extremas temperaturas. “Son récord y afectan a 150 millones de estadounidenses”, agregó. Puso como ejemplo lo que sucedió en Puerto Rico, con temperaturas cercanas a los 50 grados Celsius, San Antonio con 47 grados y Phoenix que tuvo durante 27 días 43 grados de temperatura.
Los anuncios, aseguró Biden, son para hacer que el país esté más preparado y pueda responder mejor y de esa manera sea más “resiliente” ante una crisis que afecta a todo el país.
El presidente se reunió de manera virtual con la alcaldesa Kate Gallego de Phoenix, Arizona, y al alcalde Ron Nirenberg de San Antonio, Texas. En estos estados es donde más ha golpeado el calor en las últimas semanas. Según la Casa Blanca, Biden quiso escuchar de ellos directamente cómo sus comunidades están siendo impactadas por el calor extremo y “discutir los pasos que la administración está tomando”, según explicó en un evento posterior.
Este verano en Texas se llevan reportadas al menos 10 muertos por temperaturas que han llegado hasta los 46° Celsius.
Texas es uno de los estados más golpeados por el calor. En la foto, bañistas en llantas inflables flotan en el río Comal, en New Braunfels, Texas. (AP Foto/Eric Gay)
En algunas zonas de Arizona la situación es más dramática. En el condado de Maricopa, registraron más de 20 días seguidos con temperaturas superiores a los 43° grados, lo que provocó al menos 18 muertos.
Gallego le agradeció a Biden durante el evento el “liderazgo” que tomó el presidente sobre este tema, que está haciendo sufriendo Phoenix y todo el condado de Maricopa.
Las acciones anunciadas por Biden no tienen que ver en esta oportunidad con acciones para prevenir el cambio climático o intentar reducir las causas del calentamiento global, sino para reducir los efectos cada vez que se producen estos fenómenos.
Más inspecciones laborales
Biden pretende mayores controles para impedir más muertes de trabajadores afectados por el calor extremo. En Estados Unidos durante los últimos 10 años murieron 436 personas mientras trabajaban por causa del calor.
En los últimos 10 años murieron 436 personas por calor extremo en Estados Unidos mientras estaban trabajando, según cifras oficiales.
Además, el calor “es la primera causa de muerto por motivos climáticos”, dijo el presidente. Unos 600 estadounidenses al año que mueren por consecuencia de sufrir episodios de calor extremo.
Una de las órdenes emitidas por el presidente es que el Departamento de Trabajo realice mayor cantidad de inspecciones a lugares de trabajo que pueden ser los más expuestos para los trabajadores que deben lidiar con el calor extremo.
El presidente entiende que los empleadores “pueden y deben” tomar medidas para proteger a sus trabajadores y ayudar a garantizar que los empleados conozcan sus derechos, según dijo.
El Departamento de Trabajo intensificará la aplicación de multas por “inseguridad térmica”. Las industrias donde se incrementarán las inspecciones son la construcción y la agricultura.
Mejorar los pronósticos
En algunas partes de Estados Unidos el pronóstico metereológico es extremadamente preciso, al punto que puede anunciar exactamente a qué hora empezará a llover o a qué hora parará.
Los condados también tienen sus propios servicios de alerta, que conectados con el servicio nacional de meteorología emite alertas a los ciudadanos que les llegan por correo electrónico o mensaje de texto anunciando diversos episodios previstos.
La información que tienen los estadounidenses sobre el clima tiene bastante precisión, pero invertirán para poder anunciar con más tiempo olas de calor que sean prolongadas en el tiempo. Foto: Bernd Diekjobst/dpa
Entre las medidas que anunció Biden este jueves está la de aumentar la inversión en los servicios meteoreológicos para ampliar esta capacidad de previsión a otros lugares de Estados Unidos.
Biden anunció que a través de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) invertirá hasta $7 millones “para mejorar los pronósticos meteorológicos de la nación”.
El anuncio asegura que “en asociación con universidades y otras instituciones, la NOAA establecerá un nuevo consorcio de asimilación de datos centrado en desarrollar mejores capacidades de predicción meteorológica y maximizar el valor proporcionado por el sistema de observación global de la NOAA”, informó la Casa Blanca.
El gobierno federal quiere ayudar así a los estados tengan la información que les permita prepararse para los largos períodos de calor extremo.
Los anuncios Biden los hizo acompañado de Julie Sum, secretaria interina del Departamento de Trabajo, Liz Sherwood-Randall, su asesora de Seguridad Nacional, Tom Perez, director de la Oficina de Asuntos Intergubernamentales, Deanne Criswell de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) y de Rick Spinrad, de la NOAA. Virtualmente estuvieron conectados los dos alcaldes.
Inversiones para la sequía en Colorado, California y Washington
Otro de los anuncios de la Casa Blanca fueron una inversión de $152 millones para realizar obras de almacenamiento de agua en el marco de la ley de Infraestructura que el Congreso aprobó con el apoyo de los dos partidos.
El oste de Estados Unidos viene afectado desde hace dos años por una fuerte sequía. La imagen es de una plantación de trigo afectada por la falta de agua en Bowdon, Dakota del Norte. REUTERS/Karl Plume
Las obras se realizarán en los estados de California, Colorado y Washington. “Esta inversión ayudará a aumentar la capacidad de almacenamiento de agua y colocar tuberías de transporte para brindar agua potable confiable y segura y desarrollar la resiliencia para las comunidades más afectadas por la sequía”, informó la Casa Blanca.
Desde el 2021 el oeste de Estados Unidos viene sufriendo una severa sequía, considerada la más grave en cientos de años. Esto incluso ha provado consecuencias económicas como el aumento en el precio de los granos.
“A raíz de las severas condiciones de sequía en todo el oeste, la administración está realizando inversiones coordinadas a través de la Ley de Infraestructura Bipartidista y la Ley de Reducción de la Inflación para modernizar la infraestructura esencial de agua, invertir en nuevos proyectos de desalinización y reciclaje de agua y ampliar el acceso a agua potable limpia para las comunidades que han tratado durante mucho tiempo con suministros de agua contaminada”, informó la Casa Blanca.
Al terminar los anuncios, los periodistas presentes intentaron hacerles preguntas, especialmente por la situación judicial de su hijo Hunter Biden, pero el presidente no contestó.