La inauguración de la presa Monte Grande, hace aproximadamente un año, se presentó como una solución para el desarrollo agrícola y la prevención de inundaciones en la región. Sin embargo, recientes denuncias de la comunidad local han puesto de manifiesto problemas relacionados con la explotación pesquera y la exclusión de los habitantes originarios del área.
Pesca Ilegal y Exclusión Comunitaria:
Residentes de Monte Grande han expresado su preocupación por la actividad de pescadores provenientes de localidades vecinas, como San Juan, Vicente Noble y Pescadería, que están extrayendo grandes cantidades de peces de manera indiscriminada. Mientras tanto, a los habitantes locales se les ha prohibido el acceso al embalse. Marcia Mercedes, presidenta del Comité de Protección y Defensa de la comunidad Monte Grande, señaló que, aunque se introdujeron alrededor de 100,000 alevines en la presa para incentivar la pesca local, la comunidad no tiene acceso a esta actividad. Además, denunció que los militares encargados de la seguridad de la presa permiten la entrada de pescadores foráneos a cambio de beneficios económicos.
Impacto Ambiental y Riesgos Adicionales:
Las denuncias también apuntan al uso de sustancias químicas por parte de algunos pescadores para envenenar el agua y facilitar la captura de peces. Esta práctica representa una amenaza para otras especies acuáticas, como camarones y jaibas, que son especialmente vulnerables a estos químicos. La comunidad teme que, de no tomarse medidas, estas prácticas puedan llevar a la extinción de ciertas especies y alterar el equilibrio ecológico de la zona.
Respuesta de las Autoridades y Demandas de la Comunidad:
A pesar de las denuncias presentadas ante el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi) y el Ministerio de Medio Ambiente, los residentes afirman que no se han implementado medidas efectivas para regular la pesca en la presa. Esta situación ha generado tensiones y protestas, incluyendo la quema de una embarcación utilizada por pescadores foráneos como expresión de descontento. La comunidad exige una intervención inmediata de las autoridades para garantizar el acceso equitativo a los recursos pesqueros y proteger el medio ambiente acuático.
La situación en la presa Monte Grande destaca la necesidad de una gestión más inclusiva y sostenible de los recursos hídricos y pesqueros, que beneficie a las comunidades locales y preserve el equilibrio ecológico de la región.