Los significativos avances que República Dominicana ha logrado en materia de inclusión financiera, según los últimos datos del Global Findex 2025 del Banco Mundial, son resultados directos del esfuerzo mancomunado de las autoridades monetarias y financieras junto a la banca múltiple, con el objetivo de impulsar el acceso a los servicios financieros formales, valoró la Asociación de Bancos Múltiples de la República Dominicana (ABA).
La ABA recordó que, en el caso de República Dominicana, los últimos datos del estudio muestran avances relevantes para el país y uno de ellos es que, entre 2011 (que fue el primer año de publicación) y 2025, el porcentaje de personas con cuenta de ahorro en una institución financiera formal pasó de 38% a 63%.
También, los datos del Global Findex, a julio de 2025, revelan que las personas que ahorraron durante los últimos 12 meses aumentaron de 16% a 27%, superando el promedio de América Latina (24%); asimismo las personas que durante los últimos 12 meses tomaron prestado en una institución formal se incrementó de 24% a 29%, también superando a los países de la región (27%).
La ABA consideró que estos resultados evidencian el compromiso sostenido y estratégico del sector bancario con la modernización, la digitalización y el acceso generalizado de la ciudadanía a los servicios financieros formales.
“Los mencionados avances no hubieran sido posibles sin la decidida apuesta de los bancos múltiples dominicanos por la digitalización de sus servicios y la transformación de sus modelos de negocios, apoyándose en la tecnología para habilitar canales de atención alternativos a la tradicional sucursal bancaria”, planteó la ABA, al destacar entre estos al internet banking, las aplicaciones móviles, servicios de mensajería instantánea y novedosos procesos como el onboarding digital.
En aras de fomentar la formalidad y un mayor acceso a los servicios bancarios, incluyendo a las micro pequeñas y microempresas, el gremio ha incentivado el establecimiento del Sistema de Garantías Mobiliarias para las micro, pequeñas y medianas empresas, el Código We Finance para desagregar data de acceso bancario con enfoque de género, el Score de Data Alternativo para personas no bancarizadas, entre otras iniciativas.
La ABA puso de relieve, como un aspecto esencial, el impulso por parte de las autoridades con el fin de avanzar en el propósito de cerrar la brecha financiera, cuyos esfuerzos incluyen la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera que lidera el Banco Central y otras relevantes iniciativas.
El sector sistema financiero va por buen camino
La ABA recordó que la inclusión financiera se define como el grado de acceso que tienen las personas y empresas a productos y servicios financieros tales como transacciones, pagos, ahorros, créditos, seguros, entre otros. Debido a la correlación existente entre mayores niveles de inclusión financiera, reducción de la pobreza y la profundidad de los sistemas financieros, el interés por medir y monitorear el avance de los países en esta materia es cada vez más importante.
“Por tal motivo, los resultados positivos que se observan en el Global FINDEX indican que el sistema financiero-bancario nacional va por buen camino y debe ser un aliciente para que las entidades de intermediación financiera, reguladores y supervisores continúen allanando el camino para que cada vez más hogares y empresas dominicanas accedan al sistema financiero formal y puedan emprender sus proyectos de consumo o inversión”, indicó el gremio.
Destacó, además, que el Ranking de Digitalización de la Superintendencia de Bancos refleja que, para 2024, el 94% de los bancos múltiples ya contaban con plataformas de banca en línea, sumando aproximadamente 7.8 millones de usuarios y, además, el 94% de los bancos cuenta con aplicaciones móviles y más de un 63% prestan servicios vía mensajería instantánea. “Gracias a estos desarrollos, hoy día, más de la mitad de la población (53%) realiza o recibe pagos digitales, comparado con el 38% que lo hacía en 2011”, expuso.
La ABA aseguró que estos avances son aún más meritorios cuando se toma en cuenta que, desde el año 2003, el país ha atravesado por diversas crisis sistémicas que han impactado negativamente y en forma considerable al número de personas y empresas con acceso a los servicios financieros. A modo de ejemplo, citó la crisis COVID19 que, de acuerdo con declaraciones del Superintendente de Bancos, provocó al sistema financiero formal la pérdida de unos 300,000 usuarios.