En un mensaje dirigido a las familias de la República Dominicana, el doctor Reynaldo Franco Aquino, Obispo Nacional de las Iglesias Pentecostales de Jesucristo (IPJ) y presidente de la Comunidad Apostólica Internacional (COAPIN), les instó a unirse en oración y buscar la dirección de Dios durante esta época, en la que muchas están en preparación para la temporada navideña.
El Obispo destacó la importancia del mes de noviembre como el “Mes de la Familia”, designado por el decreto 1656 del Poder Ejecutivo en el año 1971.
Este mes tiene como objetivo llevar a cabo campañas para la formación integral de la familia, considerada la célula principal de la sociedad en el territorio nacional.
En el comunicado, el Obispo Franco Aquino enfatizó la importancia de tener a Dios en el centro de la vida de las familias, recordando que la República Dominicana es el único país que tiene a Dios en su escudo y la Biblia como manual de vida.
Expresó su convicción de que, a pesar de las dificultades y juicios pasados y presentes, el Padre Celestial desea bendecir y multiplicar su gracia y favor sobre el pueblo dominicano.
El líder religioso señaló que la ausencia de promoción de valores en el contenido que sirven los medios de comunicación, la pseudo creencia de que la fatiga y el estrés son características de una vida productiva y la falta de respeto y de honra a las generaciones anteriores, figuran entre los principales desafíos que enfrenta la familia en la presente generación.
Aseguró que solo en Dios se encuentra la verdadera salvación de estos y otros retos y destacó la importancia de conocer los códigos de honra y honor divinos para evitar caer en la maldad, el pecado y el juicio debido al desconocimiento.
En este contexto, instó a las familias a no dejar de congregarse, especialmente ante los desafíos experimentados durante y después la pandemia e invitó al pueblo a explorar los diversos ministerios y servir con los dones y talentos que el Señor ha otorgado, con el objetivo de dar gloria a su nombre.
Además, resaltó el papel fundamental de la familia como el núcleo desde el cual se aprenden normas, formaciones y sistemas de valores, siendo el espacio donde se experimenta confianza y plenitud, enfatizando así la importancia de fortalecer la red de apoyo familiar.
De igual forma llamó a ampliar los muros de protección para que el diseño de Dios prevalezca y el legado continúe en las generaciones futuras. La República Dominicana, afirmó el Obispo Franco Aquino, “tiene la responsabilidad de ser una punta de lanza ante las naciones para activar la atmosfera profética de Dios, superando el mal con el bien y manifestando el amor eterno”, finalizo.