Santo Domingo.- Este sábado, el cantante mexicano Marco Antonio Solís, “El Buki”, ofreció un espectáculo inolvidable en el Estadio Quisqueya, donde cautivó a miles de fanáticos con su inconfundible voz y carisma.
El evento formó parte de su gira “Más Cerca de Ti Tour 2025”, que ha estado recorriendo diversas ciudades de América Latina.
El escenario se iluminó y el ambiente se colmó de emoción cuando, puntual como siempre, Marco Antonio Solís hizo su entrada al escenario, vestido de negro con una chaqueta blanca que brillaba bajo las luces. Con una sonrisa amplia y su calidez característica, saludó al público diciendo: “¡Buenas noches, mis hermanitos!”, lo que desató una ovación ensordecedora.
Desde el primer minuto, el cantante mexicano logró una conexión profunda con la audiencia. Más allá de su poderosa voz, compartió reflexiones sobre la vida, el éxito y la felicidad, dejando claro que su música no solo es sentimiento, sino también una experiencia de vida. En uno de los momentos más destacados, Solís expresó: “El éxito no está en lo material, sino en la paz con la que dormimos cada noche”, generando una profunda reflexión entre los presentes.
A lo largo del concierto, no faltaron los momentos nostálgicos, como cuando interpretó “El peor de mis fracasos”, una de sus canciones más emblemáticas, desatando una ola de emociones entre los asistentes. Además, compartió divertidas anécdotas, incluyendo una historia de amor del pasado que inspiró varias de sus canciones de desamor, destacando con humor cómo los celos fueron el único defecto de su ex pareja.
Con una puesta en escena dinámica, Marco Antonio Solís no se limitó a cantar. A lo largo de las más de dos horas de show, recorrió el escenario con movimientos elegantes y juguetones, haciendo suspirar especialmente a las mujeres del público. Con cada paso, reafirmaba por qué sigue siendo uno de los artistas más queridos y admirados de América Latina.
El repertorio fue un recorrido por sus grandes éxitos. Temas como “Sin Pensarlo”, “Tu cárcel”, “Si no te hubieras ido” y “Dónde estará mi primavera” hicieron vibrar al público, mientras que los duetos con su hija Mar Solís, en “Vete, aléjate de mí” y “Extrañándote”, añadieron un toque de ternura y emoción que conmovió a todos.
Uno de los momentos más mágicos de la noche fue cuando Marco Antonio Solís interpretó “La Venia Bendita” acompañado de un mariachi, lo que sumó un toque de la esencia de la música mexicana. El público, en pie, celebró con aplausos y vítores, elevando aún más la atmósfera de celebración.
Un momento que quedará grabado en la memoria colectiva de los asistentes fue cuando el cantante levantó su copa y brindó con sus seguidores: “Por el amor, por la vida y por el presente”, provocando una ovación que resonó en todo el estadio.
El cierre del concierto con “Más que tu amigo” fue apoteósico. El público se levantó, cantó y bailó, transformando la despedida en una auténtica fiesta. Con una producción impecable y una entrega total, Marco Antonio Solís demostró, una vez más, por qué sigue siendo una leyenda viviente de la música latina.
Con este concierto, “El Buki” no solo reafirmó su estatus como uno de los artistas más importantes de su generación, sino que dejó claro su increíble capacidad para emocionar, entretener y conectar con su público, quienes lo consideran parte de su vida.