En San José de Ocoa, más de 3,500 niños y niñas fueron beneficiados con kits de útiles escolares en una jornada social que más que un reparto de utensilios fue una fiesta de esperanza.
La iniciativa fue encabezada por el empresario y político Neury Tejeda, quien, junto a otras personas, recorrió comunidades llevando kits escolares a los pequeños de Ocoa, Parra, El Naranjal, La Ciénega, Sabana Larga, Nizao, Rancho Arriba, Los Ranchitos, La Horma y El Pinal.
Madres encuentran soluciones
En el rostro de doña Marta, madre de tres niños en Rancho Arriba, se mezclaba el cansancio con el alivio.
“Es un gran aporte poder tener resuelto los útiles escolares de mis hijos”, dijo con una sonrisa tímida, mientras veía a su pequeño abrazar los cuadernos nuevos como si fueran tesoros.
Como ella, decenas de padres expresaron que, en tiempos donde cada gasto duele en los bolsillos, recibir estos útiles es un verdadero alivio y una motivación para que sus hijos sigan estudiando.
Una provincia unida
Los niños, entre risas y voces emocionadas, hojeaban sus cuadernos nuevos y sacaban con orgullo los lápices de colores, soñando con dibujos que pronto llenarán las páginas en blanco.
Para ellos, la jornada no fue solo un regalo material, sino una promesa: la de que su educación importa y que su futuro puede escribirse con tinta de esperanza.
“Creemos firmemente que la educación es el pilar del desarrollo de nuestros pueblos, y por eso no descansaremos hasta que cada niño y joven de Ocoa tenga las herramientas necesarias para construir un mejor futuro”, expresó Tejeda en medio del recorrido.
Sembrar futuro en cada cuaderno
La entrega de útiles escolares en Ocoa no se quedó en números. Cada mochila cargada fue también un recordatorio de que cuando la comunidad se une, los sueños de la niñez se vuelven más alcanzables. En cada esquina de la provincia, los colores, las sonrisas y la gratitud dejaron una lección silenciosa: invertir en los niños es sembrar futuro.
La jornada no solo alivió las preocupaciones de las familias, también dejó una enseñanza clara: cuando la comunidad se une, la educación florece. En cada escuela, los rostros de los estudiantes reflejaron la motivación de empezar las clases con el entusiasmo renovado.
Con acciones como esta, la provincia de San José de Ocoa reafirma que invertir en la niñez es sembrar esperanza en el mañana.