El presidente de Rusia, Vladimir Putin, cree que las familias rusas deben tener al menos dos hijos por el bien de la supervivencia étnica de su nación, y tres o más para que ésta se desarrolle y prospere.
Rusia ha sufrido numerosas bajas, aunque no reveladas, desde que lanzó su guerra en Ucrania hace casi dos años, y cientos de miles de personas han huido del país por oposición al conflicto o por miedo a ser llamadas a luchar.
Putin dijo a los empleados de una fábrica de tanques en la región de los Urales que dos niños por familia era el número mínimo para que los pueblos de Rusia preservaran sus identidades.
“Si queremos sobrevivir como grupo étnico, bueno, o como grupo étnico que habita en Rusia, debemos tener al menos dos niños”, afirmó.
Si cada familia tuviera un solo hijo, la población se reduciría, afirmó. “Y para crecer y desarrollarse se necesitan al menos tres hijos”.
Putin se declara partidario de los “valores tradicionales” basados en la familia, la nación y la fe cristiana ortodoxa. Durante sus 24 años en el poder, el país ha restringido severamente las expresiones de orientación sexual e identidad de género y ha prohibido el “movimiento LGBT” por considerarlo “extremista”.
Rusia sufrió dos décadas de disminución gradual de su población tras el colapso de la Unión Soviética, exacerbada por problemas crónicos como el alcoholismo.
La oficina estatal de estadísticas estimó la población en 146,4 millones a principios de 2023, por debajo de los casi 149 millones de 20 años antes, pero por encima de un mínimo de alrededor de 143 millones entre 2007 y 2012.
Tanques para la guerra
La fábrica Uralvagonzavod, donde habló Putin ante un grupo de empleados de corta edad, es la encargada de la producción de tanques y blindados para el Ejército ruso.
El mandatario ruso inspeccionó tanques T-72BZM y T-90 Proriv listos para partir rumbo al campo de batalla en Ucrania.
En el vídeo publicado por la Presidencia rusa se ve a Putin en una de las naves conversando con obreros de la fábrica y con los tanques al fondo.
Durante la visita, Putin supervisó una nave en la que se preparan los tanques y blindados para las pruebas mecánicas y de tiro y visitó otra factoría, de reciente creación, que fabrica transmisiones para los carros de combate.
Durante la visita, Putin conversó con los trabajadores de la fábrica a los que habló del conflicto con Ucrania y sus orígenes.
“Todo el mundo sabe que nunca hemos hecho ninguna diferenciación entre los rusos y los ucranianos, entre Rusia y Ucrania”, dijo.
Según el jefe del Kremlin, la gran mayoría de los ucranianos y los rusos “siempre han creído que en realidad se trata de la misma cosa”.
El Kremlin destacó en un comunicado que la línea de montaje de tanques de Uralvagonzavod fue creada durante la Segunda Guerra Mundial y es la única de producción continua de este tipo de blindados en el país.
Desde su creación, la empresa ha fabricado más de 100.000 carros de combate entre tanques y blindados.
Ucrania afirma haber destruido durante los casi dos años de guerra varios miles de tanques y blindados rusos, por lo que la industria militar rusa se ha visto obligada a incrementar considerablemente su producción.
Según un informe publicado a fines de 2023 por el Ministerio de Defensa ruso, durante el año pasado el país fabricó 1.500 tanques y 2.200 blindados. EFE