Santo Domingo.- La Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos ha publicado su Informe Especial 301 del año 2025, en el cual se destaca que, por segundo año consecutivo, la República Dominicana ha quedado fuera de la lista de vigilancia.
En un acto simbólico celebrado recientemente, la Dirección General de Aduanas (DGA) procedió a la destrucción de 1,061,000 unidades de mercancía falsificada que infringían derechos de marcas y patentes. Entre los productos destruidos se encontraban falsificaciones de reconocidas marcas internacionales como Nike, Adidas, Louis Vuitton, Gucci, Ray-Ban, Puma, Victoria’s Secret, Diesel, Hugo Boss y Versace. Estos productos, que intentaban ser comercializados en el país, fueron destruidos de acuerdo con los procedimientos legales vigentes para mercancía decomisada.
El evento contó con la presencia de importantes personalidades, como los viceministros Vilma Abaje y Ramón Pérez Fermín del Ministerio de Industria, Comercio y Pymes, los agregados Edwin López y Abdías Ortiz de la Embajada de los Estados Unidos, así como representantes de la Asociación Dominicana de Propiedad Intelectual (ADOPI), la Confederación Dominicana de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa, la Federación Dominicana de Textileros, entre otros.
El director general de Aduanas, Yayo Sanz Lovatón, destacó durante el acto que esta acción es una prueba del compromiso de la República Dominicana con la protección de la propiedad intelectual. Recordó que, en 2024, el país fue eliminado de la Lista de Vigilancia del Informe Especial 301 de los Estados Unidos después de más de 30 años de estar en ella. “Hoy no solo estamos eliminando mercancía que representa una amenaza para nuestra economía formal, sino que también celebramos una noticia que confirma que estamos en el camino correcto”, expresó Sanz Lovatón.
La mercancía destruida estaba compuesta por productos que representaban una amenaza para el comercio legítimo, los derechos de los consumidores y la economía nacional. Entre los productos destruidos se encontraban 500,000 unidades de partes superiores y suelas para la elaboración de calzado, 20,000 pares de calzados, 41,000 unidades de cosméticos, 100,000 unidades de cabezas de cargadores y 400,000 unidades de cables USB.
El acto de destrucción fue supervisado por el magistrado Jonathan Baró, coordinador de la Unidad de Propiedad Intelectual de la Procuraduría General de la República, quien ha sido clave en el proceso. También estuvieron presentes representantes legales de las marcas afectadas y de la Asociación Dominicana de Propiedad Intelectual (ADOPI), quienes brindaron su apoyo técnico y legal en el proceso de destrucción.
El presidente de la DGA reiteró que este tipo de medidas no son casualidad, sino el resultado de un esfuerzo constante y coordinado por parte de varias entidades para proteger la propiedad intelectual, combatir el contrabando y asegurar la legalidad en el comercio. Cada mercancía destruida, aseguró, representa una victoria en la lucha contra el comercio ilícito.