Barahona.- Un tiburón ballena de aproximadamente ocho metros de longitud fue intervenido exitosamente por técnicos del Acuario Nacional y de la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos (Anamar), tras ser avistado con heridas en las costas de Barahona desde hacía varios días.
El ejemplar, un macho adulto, tenía incrustados dos anzuelos de pesca: uno en el costado izquierdo y otro en la cola, lo que le provocaba heridas visibles. El operativo de rescate contó con el apoyo de buzos aficionados, pescadores del Club Náutico Manatí y personal técnico especializado.
La extracción de los anzuelos fue realizada por el buzo Huascar A. Peláez Khoury, mientras que el procedimiento fue documentado por Eugenia De los Santos Velasco. Tras la intervención, el tiburón fue evaluado por el equipo técnico, que confirmó que el animal mostraba un comportamiento activo y signos visibles de buena salud.
Jimmy García Saviñón, presidente de Anamar y director del Acuario Nacional, exhortó a la ciudadanía, especialmente a los pescadores, a proteger a esta especie marina. “Esta especie, a pesar de su gran tamaño, es completamente inofensiva. Representa una oportunidad única para la educación ambiental y el ecoturismo marino”, expresó.
El tiburón había sido visto en videos y fotografías por residentes y turistas en las zonas de Salina y El Cayo, generando tanto entusiasmo como preocupación, luego de que se reportara un intento de captura por parte de pescadores locales. Las autoridades han advertido que este tipo de acciones están prohibidas y pueden acarrear sanciones.
El anzuelo retirado es del tipo “J”, común en la pesca deportiva de grandes especies como marlín o atún, pero extremadamente peligroso para la fauna marina protegida, ya que estos animales pueden engancharse accidentalmente.
El tiburón ballena (Rhincodon typus), considerado el pez más grande del mundo, puede superar los 12 metros de longitud. Se alimenta exclusivamente de plancton y pequeños organismos y habita en aguas cálidas tropicales. Está catalogado como especie en peligro por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
En República Dominicana, está vigente una veda indefinida desde 2017 que prohíbe la pesca, captura y comercialización de tiburones, rayas y peces loro, de acuerdo con la Resolución 023/2017 del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.