El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció la grave crisis humanitaria que afecta a la Franja de Gaza, señalando que “muchas personas están muriendo de hambre”. Estas declaraciones se dieron durante un foro empresarial en Abu Dabi, en el marco de su reciente gira por Oriente Medio. Según su análisis, la situación en Gaza es una de las múltiples crisis globales que busca abordar. Este reconocimiento se produce mientras la guerra entre Israel y Hamas amenaza con intensificarse aún más.
Trump afirmó que su administración está observando de cerca los acontecimientos en Gaza y expresó su preocupación por las condiciones extremas que enfrenta la población. “Debemos encargarnos de eso. Mucha gente está muriendo de hambre… Están pasando muchas cosas malas”, declaró. Estas palabras coinciden con un contexto de ataques israelíes en la región, que han dejado decenas de muertos y han incrementado la presión internacional para buscar soluciones al conflicto.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, afirmó que su gobierno está dispuesto a aceptar una pausa temporal en las operaciones militares en la Franja de Gaza con el objetivo de facilitar la liberación de rehenes, pero descartó categóricamente la posibilidad de poner fin a la guerra sin la derrota total del grupo terrorista.
El conflicto fue desatado el 7 de octubre de 2023 con la incursión de miles de yihadistas en el sur de Israel, donde asesinaron, violaron y secuestraron a miles de personas. Desde entonces, las Fuerzas de Defensa han realizado una ofensiva en la que eliminaron a los principales jefes políticos y militares de Hamas, y Netanyahu tiene como objeivo barrer lo que resta de las milicias de la Franja.
“La situación ha cambiado. En los próximos días, entraremos [en Gaza] con toda nuestra fuerza para completar la operación. Completar la operación significa someter a Hamas. Significa destruir a Hamas”, expresó el mandatario.
De acuerdo con funcionarios de salud en Gaza, al menos 64 personas perdieron la vida en ataques israelíes recientes, que se concentraron en áreas como Deir al-Balah y la ciudad de Jan Yunis. Los hospitales locales, como el hospital Indonesio y el hospital Nasser, recibieron los cuerpos de las víctimas. Según informó un funcionario israelí bajo condición de anonimato, estos ataques forman parte de acciones preparatorias para una operación militar de mayor envergadura, cuyo objetivo sería presionar a Hamás para liberar a los rehenes que mantiene cautivos.
En este contexto, las familias de los rehenes han solicitado a su gobierno que colabore con Trump para lograr la liberación de las personas retenidas en Gaza. Un comunicado emitido por un foro de apoyo a las familias expresó su preocupación por los informes de ataques intensificados en la región. Según Israel, se estima que 23 rehenes permanecen con vida. La visita de Trump a Oriente Medio había generado expectativas de un posible cese al fuego o de la renovación de la ayuda humanitaria, pero no se lograron avances concretos en estas áreas.
Trump no va a Turquía
Durante la parte final de su viaje, Trump también visitó la Casa de la Familia Abrahámica en Abu Dabi, un complejo interreligioso que incluye una mezquita, una iglesia y una sinagoga. Este lugar, construido tras la firma de los Acuerdos de Abraham en 2020, simboliza el reconocimiento de Israel por parte de los Emiratos Árabes Unidos y representa un esfuerzo por fomentar la cooperación entre las tres principales religiones abrahámicas. La visita marcó el cierre de su primer viaje internacional significativo durante su segundo mandato.
En otro tema, Trump expresó su intención de reunirse próximamente con el presidente ruso, Vladímir Putin, afirmando que “es momento de simplemente hacerlo”. Según Trump, Putin no asistió a la reunión en Turquía entre funcionarios ucranianos y rusos porque él no estaba interesado en participar. Trump aseguró que la reunión con Putin se llevará a cabo “tan pronto como la podamos organizar”.
El presidente también aprovechó su visita a Oriente Medio para destacar las relaciones comerciales entre los Emiratos Árabes Unidos y empresas estadounidenses. En un evento empresarial, Trump se refirió a sí mismo como un “animador” para su país, subrayando la importancia de promover los intereses económicos de Estados Unidos en el extranjero. “¿Creen que Biden estaría haciendo esto? No lo creo”, comentó, en una crítica directa a su sucesor.
Finalmente, Trump anunció que regresará a Estados Unidos para conocer a su nuevo nieto, hijo de su hija Tiffany Trump, quien recientemente dio a luz. “Mi hija tuvo un bebé y voy a ir a casa a conocerlo”, declaró, describiendo su viaje a Oriente Medio como “increíble” pero señalando que es momento de volver a casa.
Mientras tanto, en Israel, miembros del gabinete se reunieron para evaluar las negociaciones en Qatar y decidir los próximos pasos en relación con la situación en Gaza. Según un funcionario israelí, estas discusiones son clave para determinar el curso de acción en medio de la creciente tensión en la región.