Estados Unidos.- Un incidente violento ocurrido en un motel de Kissimmee, Florida, conmocionó a la comunidad local y ha captado la atención de los medios internacionales. Un hombre identificado como Piero Estefano But-Castillo, de 25 años y nacionalidad chilena, enfrenta cargos de asesinato premeditado tras presuntamente golpear hasta la muerte a Robert Krusinowski, un residente de 55 años, utilizando un extintor de incendios.
Según informó el sheriff Marcos López del condado de Osceola, el ataque ocurrió el pasado miércoles en el Quality Inn ubicado en Entry Point Boulevard.
De acuerdo con las declaraciones del sheriff durante una conferencia de prensa, el incidente se desató luego de que But-Castillo fuera notificado de su desalojo del motel. En un intento por calmar la situación, Krusinowski, quien era conocido por ayudar al personal del motel con tareas de mantenimiento, intervino desarmado.
Sin embargo, el intento de mediación terminó en tragedia cuando el sospechoso, aparentemente enfurecido, lo atacó de manera brutal. “Fue un ataque salvaje con un extintor de incendios”, afirmó López, quien también destacó que la víctima sufrió un trauma severo en la cabeza que resultó fatal.
Detalles del ataque y la respuesta policial
El ataque fue reportado a las autoridades a través de una llamada al 911 alrededor de las 4:00 p.m. del miércoles. Según consignó Fox News, testigos presenciales describieron cómo But-Castillo golpeaba y pisoteaba a Krusinowski antes de usar el extintor como arma. Cuando los agentes del sheriff llegaron al lugar, encontraron al sospechoso aun agrediendo a la víctima. A pesar de los esfuerzos por reanimar al agraviado, este no sobrevivió a las heridas.
El sheriff López señaló que el comportamiento del sospechoso fue extremadamente violento y que incluso opuso resistencia a los oficiales durante su arresto. Además de enfrentar cargos por asesinato premeditado, But-Castillo ha sido acusado de resistencia a la autoridad con violencia, agresión y daños criminales. Actualmente, permanece detenido sin derecho a fianza.
Un residente conocido y un ataque que no quedará impune
Krusinowski era un residente de larga data en el motel y era apreciado por su disposición a colaborar con el personal en tareas de mantenimiento. Su muerte ha dejado un vacío en la comunidad local. “Estos ataques salvajes no quedarán impunes aquí”, aseguró el sheriff López, quien también instó a la población a evitar intervenir en situaciones potencialmente peligrosas y a dejar que las autoridades manejen este tipo de conflictos.
“Es mejor que no se involucren. No saben con quién están tratando, si la persona está psicótica o bajo los efectos de las drogas”, añadió.
El historial migratorio del sospechoso
Según detalló el New York Post, But-Castillo ingresó a los Estados Unidos por primera vez en 2019 con una visa de estudiante no inmigrante, aunque posteriormente abandonó el país por razones desconocidas. El 1 de enero de este año, regresó al país con una visa de turista válida por 90 días. El ataque ocurrió apenas una semana después de su llegada, lo que ha generado preguntas sobre su estado mental y su comportamiento durante su estancia en el motel.
Las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos. Según informó el sheriff López, se están revisando grabaciones de cámaras de seguridad del motel y videos captados por testigos, los cuales han sido incorporados como evidencia en el caso.
Un llamado a la precaución y a la justicia
El caso generó un fuerte impacto en la comunidad de Kissimmee, un área conocida por su proximidad a los parques temáticos de Orlando y su afluencia de turistas. Las autoridades locales han aprovechado la oportunidad para recordar a los ciudadanos la importancia de no intervenir directamente en situaciones de conflicto y de reportar cualquier comportamiento sospechoso a las fuerzas del orden.
Mientras tanto, But-Castillo enfrenta un proceso judicial que podría derivar en una condena severa, dada la gravedad de los cargos en su contra.