Mediante la firma de un acuerdo, el Estado dominicano, representado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD) y el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), recibió una contribución no reembolsable de la Unión Europea para el programa regional «Enverdecer el sistema financiero del Caribe» a nivel de la República Dominicana, cuyo beneficiario directo es el BCRD.
La donación, por un monto global de 5,850,000 euros permitirá implementar este programa hecho a la medida de asistencia técnica, subvenciones a la inversión y estudios.
En cuanto al apoyo específico al BCRD, la subvención de 500,000 euros financiará la contratación de un servicio de consultoría y otras actividades que podrían incluir viajes de estudio e intercambios con otros bancos centrales.
Establecido por la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), el programa se basa en las recomendaciones de la Red para Enverdecer los Sistemas Financiero (NGFS, por sus siglas en inglés), para integrar los riesgos climáticos en los sistemas financieros, fomentar la asistencia técnica y las herramientas, el intercambio de conocimientos, e informar y sensibilizar a los actores financieros sobre el cambio climático y el medioambiente.
Debido a su ubicación geográfica, la República Dominicana es un país expuesto y fuertemente afectado por desastres naturales, en particular, por huracanes que se han intensificado en los últimos años, así como también por tempestades, sequías e inundaciones que impactan la calidad de vida de la población y sectores de vital importancia para el desarrollo económico del país como la agricultura o el turismo.
Una nota de prensa subraya que, ante estos desafíos, el Gobierno dominicano viene desplegando esfuerzos conforme a los lineamientos de la Estrategia Nacional de Desarrollo (END) 2030 que contempla el surgimiento de una economía sostenible, inclusiva y competitiva, respetuosa con el medioambiente y adaptada al cambio climático.
El objetivo principal de la iniciativa de cambio climático es apoyar a la región Caribe en su adaptación y en su transición hacia economías de bajas emisiones de carbono a través de la integración de los riesgos climáticos en las actividades de regulación y supervisión de los sistemas financieros.
De acuerdo con la Alianza Francesa para el Desarrollo (AFD), la donación permitirá el desarrollo de capacidades del Banco Central y de otras instituciones financieras dominicanas facilitando una correcta evaluación y medición de los riesgos climáticos, así como la evaluación de proyectos amigables con el medioambiente.
Además, se brindarán capacitaciones de expertos para estructurar dichos proyectos y elaborar procedimientos para su aplicación en medidas de políticas financieras que se adopten.
El acto de firma protocolar estuvo encabezado por el gobernador del Banco Central de la República Dominicana, Héctor Valdez Albizu; el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Pável Isa Contreras; la embajadora de la Unión Europea, Katja Afheldt; el gerente del BCRD, Ervin Novas Bello; y la directora de la Agencia Francesa de Desarrollo en Santo Domingo, Virginie Díaz Pedregal.
Impactos del cambio climático
Durante sus palabras de apertura, el gobernador Valdez Albizu expresó que «para el Banco Central de la República Dominicana este convenio representa un paso de avance significativo en el objetivo de incorporar el análisis de los riesgos climáticos en la estabilidad macroeconómica y financiera, así como para el desarrollo de instrumentos de política financiera que contribuyan a fortalecer la capacidad de resiliencia de la economía dominicana ante el impacto del cambio climático».
El ministro Isa destacó que la República Dominicana «necesita impulsar sistemas financieros nacionales verdes que faciliten la lucha contra el cambio climático y sus efectos, la protección de los recursos naturales y el desarrollo económico inclusivo».
La embajadora de la Unión Europea indicó que, para hacer frente a las necesidades de financiamiento de la adaptación al cambio climático, se necesitará movilizar financiación del sector público, pero también del sector privado.
En este sentido, insistió sobre el rol fundamental que tienen los bancos centrales en la región y en el mundo, para conformar sistemas financieros resilientes y para integrar los riesgos climáticos en sus actividades.
Por su parte, la directora de la AFD resaltó la importancia de adoptar el enfoque de otros bancos centrales y reguladores financieros que son cada vez más conscientes de las implicaciones del cambio climático para la estabilidad financiera.
Agregó que los financiamientos y proyectos implementados junto a sus socios dominicanos son compatibles con una trayectoria de desarrollo bajo en carbono y resiliente.