Viena – El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) informó este domingo que, hasta el momento, no se ha detectado ningún aumento en los niveles de radiación fuera de las instalaciones nucleares iraníes bombardeadas por Estados Unidos. Según el comunicado oficial difundido en la red social X, no se prevén consecuencias para la salud ni el medio ambiente.
Los ataques, ordenados por el presidente Donald Trump, se dirigieron a tres instalaciones clave: Fordó, Natanz e Isfahán, y fueron ejecutados con bombas antibúnker de alto poder destructivo. Trump aseguró que la ofensiva fue un “gran éxito” al impactar directamente en las capacidades de enriquecimiento de uranio de Irán.
Por su parte, el Centro de Seguridad Nuclear de Irán también confirmó que “no se han registrado indicios de contaminación” en los sitios alcanzados por los bombardeos.
Ante la gravedad de la situación, el director general del OIEA, Rafael Grossi, anunció la convocatoria de una reunión extraordinaria de la Junta de Gobernadores para este lunes, con el objetivo de evaluar los riesgos en materia de seguridad nuclear.
“Hasta el momento, no esperamos que haya consecuencias para la salud de las personas o para el medio ambiente fuera de los lugares atacados”, expresó Grossi.
El OIEA concluyó asegurando que continuará monitoreando de forma estricta la situación en Irán y proporcionará actualizaciones conforme se disponga de nueva información.