The House Project Foundation arribó a su primer aniversario de servicios dedicado a comunidades vulnerables en varios países del mundo. Fundada por la familia Montaner, la organización ha demostrado un firme compromiso con su lema: «Cada Corazón Puede Ser un Hogar.»
En un año de funcionamiento, The House Project Foundation ha logrado importantes avances en sus proyectos, con el objetivo de crear un impacto positivo en comunidades invisibilizadas. Como lo expresó Marlene Rodríguez Montaner, presidenta de la fundación: “Nadie lo hace solo. Estar en la vida es descubrir que todos somos una familia, una manada, es descubrirse unido a Dios. La compasión nace del sentimiento de que somos hermanos, de que somos uno y es esa unidad que somos la que nos pone en movimiento, por eso creemos que cada corazón puede ser un hogar.”
La fundación opera a través de cuatro «casas» simbólicas en diferentes partes del mundo: GreenHouse en India, TeaHouse en Jordania, RedHouse en Venezuela y Colombia, y BlueHouse en República Dominicana. Se denominan «casas» no por ser espacios físicos, sino porque reflejan la creencia de que todas las personas pueden ser un hogar para otras, capaces de entregarse a la alegría de servir con amor.
Algunos de los logros notables en este primer año se enmarcan en dos grandes líneas: una la de la Asistencia Humanitaria, a través de la cual la fundación ha brindado a más de 500 personas acceso a servicios básicos como alimentación, atención médica, refugio y apoyo educativo básico, a comunidades vulnerables de la India, Jordania, Venezuela y Colombia.
En su línea de Desarrollo en República Dominicana, la fundación se enfoca en generar desarrollo sostenible en Los Robalos, población de cerca de 4 mil personas en la provincia de Samaná. Allí viene trabajando, de la mano de la comunidad para lograr una revolución en la forma de vivir, mejorando la calidad de vida, la educación, la vivienda, el cuidado del medioambiente, la cultura y la salud humana y animal.
La fundación en su primer año ha beneficiado más de 400 niños con suministros escolares, capacitación para maestros, tutorías y actividades lúdicas; cerca de 175 personas de refugios pequeños con servicios médicos, alimentos, abrigo, calefacción y sesiones de apoyo familiar y femenino; 130 familias y 160 personas de la tercera edad con alimentos nutritivos semana tras semana, durante este primer año, llegando a apoyar la entrega de 58 mil platos de comida en este primer año.
«El amor, la familia, el servicio y la alegría son los valores que impulsan la fundación; una obra en constante movimiento que necesita seguir sumando voluntades para ampliar la atención a quienes más lo necesitan”, manifestó Ricardo Montaner.
Para Ricardo Montaner, su esposa Marlene, sus hijos y sus nietos; Ricky y Stefi, Mau, Sara y Apolo, y Camilo, Evaluna e Índigo, este es el momento de agradecer a las personas y organizaciones que han apoyado esta causa en este primer año. Asimismo, es el tiempo de reafirmar su compromiso con el servicio hacia los más necesitados. Por eso invitan a quienes quieran formar parte de esta manada llamada The House Project, a que experimenten junto a ellos, la enorme felicidad que produce dar y ampliar el impacto hasta ahora obtenido.
Como dice la campaña digital de celebración del aniversario de la fundación, “Solo 1 Basta”. Con esta comunicación se da el tributo al poder de lo singular, a la creencia en que una persona, una conexión, una idea, una mano extendida, un primer paso, puede ser suficiente para lograr cambios. Se transmite la esencia de la fe, no solo en un ser supremo, sino también en la humanidad misma. La creencia en que cada persona tiene el potencial de ser un faro de esperanza y transformación.